Segundo día en Viena, emperatrices, casas de vivos colores y murciélagos juerguistas (01/01/24)

Llegó el 2024, comimos las doce uvas religiosamente y nos hemos despertado con un ligero dolor de cabeza... esto nos hará asomarmos a Viena algo mas tarde de lo habitual pero aunque tarde, saldremos de nuevo a conocer mas lugares y aspectos destacables de la capital de Austria... si estais preparados y os habeis puesto vuestras mejores galas para el acto de esta noche, venga... ¡en marcha!

Ayer ya nos dimos cuenta de que Viena está invadida por hordas de turistas... tal es así que los museos, palacios y demás lugares habituales de visita se saturan y en ocasiones se venden todas las entradas diarias en pocas horas... por esta razon ayer no pudimos visitar el museo de Sissi pero al menos si compramos las entradas para visitarlo hoy... así podemos conocer en mas profundidad a la figura de Isabel de Baviera tratando de separarnos un poco de la imagen cinematografica mas popular de esta figura histórica...

Visitamos inicialmente un museo realizado en honor a Isabel, ayudados por una audioguía vamos conociendo los aspectos mas significativos de su vida, dándonos una imagen de la emperatriz bastante alejada de la que ha llegado a nuestros días a través del cine, era una mujer adelantada a su tiempo en muchos aspectos, que gustaba de viajar, leer y hacer ejercicio físico, amante de la naturaleza y nada urbanita pero a la vez una mujer excesivamente preocupada por su aspecto físico y poco implicada en los asuntos de estado... una vida de lo mas interesante habría que decir...

Tras la visita al museo se recorren los apartamentos imperiales donde recorremos las estancias de palacio por donde caminaban Francisco José y su mujer Isabel, muchos de los muebles son los originales de la época y entre otras cosas curiosas podemos observar la austeridad con la que el emperador vivía y también nos sorprendemos al ver el gimnasio que Isabel tenía montado en sus estancias...

No pensaba yo que íbamos a sacar tanto partido a esta visita, ya ves tú... la verdad es que la vida de Sissi da para serie de Netflix...

Caminamos por el centro de Baviera y seguimos agravando nuestra tortícolis vienesa de tanto mirar a los bellos edificios que nos encontramos a nuestro paso...

Pero la arquitectura de Viena no se limita al estilo barroco, renacentista de su época imperial, por sus calles nos podemos encontrar múltiples ejemplos de arquitectura art noveau, modernista... o bellos casos extraños y extravagantes como la Hundertwasserhaus...

Hundertwasser fue un artista polifacético a quien se le encargó en 1977 el diseño de un conjunto de viviendas sociales y en este proyecto desarrolló sus originales ideas combinando estructuras onduladas, diseños coloristas, que en muchos casos suponen una ruptura total con los clásicos conceptos arquitectónicos... sus obras no dejan indiferente a quien las observa..

 La noche va cayendo en Viena,... anochece pronto, es cierto, pero a todo hay que adaptarse... el fresquíbiri aumenta y lo que presta ahora es algo dulce y algo calentito... no hay mas que hablar, llegó la hora de probar la archifamosa tarta de chocolate vienesa...la tarta Sacher

Ciertamente que la fama es merecida...😋

Va llegando la hora del plato fuerte del día (no, no son un surtido de salchichas vienesas)... hoy toca: ¡ópera!... os advertimos de que os pusiérais vuestras mejores galas... vamos a ver "El murciélago" de Strauss jr... vamos todos a pasar "Una noche en la Ópera"

La ópera no sabemos como será pero el teatro ya nos deja boquiabiertos por su impresionante entrada... 

Aunque es cierto que el grandioso interior (casi 2500 personas de aforo) resulta poco ornamentado para lo que estamos acostumbrados a ver en este tipo de recintos.. esto se debe a su reconstrucción durante los años 50... en la segunda Guerra Mundial fue casi totalmente destruido por los bombardeos aliados... ¿recordais que ayer os comentábamos que algunos vieneses opinaron durante su construcción que mas parecía una estación de tren que un teatro?... pues eso mismo debieron pensar los bombarderos aliados puesto que se ensañaron con el teatro... la reconstrucción se debió realizar con la austeridad y sobriedad de la época...

¿Preparados...? la ópera va a empezar...

¡Hasta mañana!

Datos prácticos.

- Concierto año nuevo. Si venís en fin de año como nosotros tenéis que saber que hay una lista de espera de más de 10 años para poder asistir al mismo. Así nos lo confirmó nuestra guía Simone del freetour. Si no tenéis entrada podéis asistir al mismo en directo desde una pantalla gigante que ponen en la plaza de la catedral.

- Reloj Anker. Podéis asistir a las 12.00 a un pequeño espectáculo donde salen todas las figuritas a pasear. 

-Palacio Hoffur. Entrada: 15€. Se visitan los apartamentos imperiales el el Museo de Sissi. Te dejan una audioguía que es muy interesante para conocer la vida de Sissi.

Si acudís en fin de año o fechas de mucho turismo coger las entradas antes porque hay muchísima gente. Cuando estábamos haciendo la cola larguísima para entrar avisaron que estaban agotadas para ese día y tuvimos que comprar para el día siguiente. Lo mismo nos ocurrió con el Palacio Belvedere (nos quedamos sin ver el Beso de Klimt) y con el Palacio de Schombrun. Las entradas se agotaron y no pudimos entrar.

-Para comer en Viena un lugar genial y bien de precio está el Naschmarkt, un mercado con numerosos puestos de comida: desde la asiática a la tradicional austríaca. Nosotros comimos en el Deli Restaurante que mezclaba la comida austríaca con la turca. Muy rica!

-Hundertwasserhaus. Imprescindible visitar este edificio tan singular y acercarse al Museo de su creador que está muy cerquita. Ahora mismo está cerrado por reformas pero abrirá próximamente.

-La cultura de los cafés en Viena es impresionante. No dejéis de tomar un café y empaparos de esta cultura en Viena. Hay dos cafés míticos en la ciudad: el Sacher por su famosa tarta aunque podéis degustarla por toda la ciudad y el Café Central que es precioso. No pudimos entrar a ninguno de ellos por sus larguísimas colas.

- Ópera de Viena. No se puede visitar Viena sin ver una ópera. Nosotros vimos El Murciélago de Johan Strauss hijo y nos encantó. Coge las entradas con tiempo en la página web o si no, puedes comprar las que ponen a la venta 3 horas antes de cada función que cuestan desde 5€ y en las que estás de pie.